Despertar de una Triste “Tarde”

Treinta minutos duró el sueño mundialista de la selección cubana Sub. 20 frente a la poderosa selección de Costa Rica, media hora en que pudimos saborear el gusto de estar dentro de un mundial, 30 minutos de un sueño que terminó convirtiéndose en una pesadilla con un amargo despertar.

Fueron los ticos lo que como se esperaba se lanzaron al ataque desde el mismo pitazo inicial al punto de acumular dos disparos a puerta en tan solo un minuto, pero la selección cubana les salió respondona y a los dos minutos el capitalino Yaudel Lahera se perdió la primera oportunidad de Cuba al dejar pasar entre sus piernas un balón dentro del área chica.

Un minuto más tarde llegaría la sorpresa, balón bombeado de Chang desde la izquierda que Lahera deja botar entre los dos defensas y de derecha y al primer palo bate al portero tico, era el uno cero que nos ponía dentro del mundial y que nos hacía soñar con la posibilidad del ¡Si se puede! (ver video del resumen en EL BLOG DEL FUTBOL CUBANO)

Tras el gol fue Costa Rica la que se hizo con el dominio del balón mientras Cuba trataba de aprovechar el contragolpe y fue así que a los 26 llegó la jugada que pudo cambiar el partido finalmente a nuestro favor, un desborde por la derecha dejó a un jugador cubano solo frente al arquero tico, pero el cubano no supo definir y su remate fue directo a las manos del portero rival dilapidando el que pudo ser el dos cero.

Cuba dilapidaba así una oportunidad dorada y dejaba con vida a una Costa Rica que apenas tres minutos más tarde comenzó a sacar todo el oficio de sus jugadores que pagó excelentes dividendos ante la inocencia de los cubanos.

Corría el minuto 29 cuando Cooper tuvo que volar para una espectacular atajada a media altura hacia la derecha, el rebote fue recogido por un jugador tico que recentró para un débil despeje cubano que cayó en los pies de un rival dentro del área grande, el jugador tico hizo un recorte y buscó la pierna de un Macías que llegaba fuerte y tarde para tropezar y desplomarse en el área. Penal. Capbell tomó la responsabilidad y con disparo fuerte a media altura a la derecha batió a un Cooper que adivinó la intención pero que no pudo hacer nada, era el 1-1.

Apenas dos minutos más tarde se levanta un centro al área, hacia el segundo palo y allí tico y cubano se levantaron en busca del balón, pero el costarricense al sentir la sombra del jugador antillano afloja el cuerpo y cae aparatosamente dentro del área para que el árbitro decretara la segunda falta penal, Esta vez fue Escoe el encargado de cobrar y con un disparo suave y a la izquierda engaño a Cooper que se lanzó hacia el otro lado: 2-1, final del sueño y comienzo de la pesadilla.

Para el segundo tiempo los centroamericanos no perdieron tiempo y a los 51 aumentaban la ventaja cuando tras un disparo fuerte cruzado y a bote pronto Cooper rechazó hacia un costado y allí nuevamente la viveza tica y la inocencia cubana se juntaron para el tres a uno, pues mientras el nuestro se paraba a ver lo que sucedía el jugador centroamericano siguió la jugada y su carrera, para cuando el defensor cubano quiso reaccionar ya había perdido la posición ante Vega que solo tuvo que empujarla al fondo de las redes.

La demolición tica continuaría minutos más tarde cuando Campbell batía a Cooper con un soberbio disparo cruzado que pegó en el segundo palo del meta agramontino para luego meterse al fondo de las redes.

A los 75 minutos Cooper deja un balón suelto dentro del área y Díaz Azofeifa aparece solo en medio del área para rematar a placer.

Tres minutos más tarde un nuevo penal a favor de Costa Rica pero esta vez el cobro se fue desviado.

Con una defensa que hacia aguas y una moral en el piso no sorprendió que cayera el sexto, tras una descolgada por la izquierda, se produce un cruzamiento para que el goleador de la noche, Campbell apareciera solo en el segundo palo para clavar el sexto de su equipo y el tercero de su cuenta personal.

Fue un seis uno, claro, inapelable, que desnudó todas nuestras carencias: físicas, técnicas y tácticas, que volvió a demostrar por el camino equivocado que se mueve nuestro futbol, de mucho corazón pero de una falta de madurez extrema, esa que no se alcanza ni en aulas ni en los entrenamientos, esa que hay que aprender en el día a día cotidiano, jugando en Ligas de mayor nivel con exigencias mayores.

Si como dicen la salud del futbol de un país lo da el nivel de sus selecciones nacionales, tras lo acontecido en el último mes y medio el diagnóstico para el nuestro es CRÍTICO.

Una vez más los resultados hablan por sí solos y señalan hacia la necesidad de cambios, cambios drásticos o seguiremos caminando en reversa y viendo nuestros sueños convertirse en pesadilla.

(Tomado de: EL BLOG DEL FUTBOL CUBANO)